
¡Caos mañanero en la México-Querétaro! Este miércoles, cerca de las 09:00 horas, una pipa de combustible chocó por alcance contra la caseta de peaje número 4 de CAPUFE, desatando un desorden vial de proporciones épicas. Aunque no hubo heridos, el impacto provocó un derrame de combustible de uno de los tanques, obligando a reducir carriles rumbo al norte.
El resultado: filas interminables, tránsito lento y un embotellamiento que parecía no tener fin. Según reportes iniciales, el conductor de la pipa iba a exceso de velocidad, perdió el control tras el golpe y terminó estrellándose contra un muro de contención antes de cruzar la caseta. Un error que convirtió la autopista en un estacionamiento gigante.
De inmediato, CAPUFE desplegó grúas para retirar la pipa y equipos de limpieza que esparcieron tierra y arena sobre el asfalto para evitar riesgos a otros automovilistas. Las autoridades pidieron extremar precauciones, sugirieron rutas alternas y alertaron sobre operativos de limpieza y remoción de escombros durante varias horas.
Este incidente, aunque sin víctimas, pone en la mesa los peligros de transportar materiales riesgosos en autopistas saturadas. No es la primera vez que una pipa causa estragos en esta vía; otros accidentes han terminado en explosiones o incendios con consecuencias fatales. ¿Será que hace falta más vigilancia y protocolos estrictos para estos monstruos rodantes?
Al cierre, no se reportan lesionados, pero la zona sigue bajo supervisión hasta completar la limpieza. Un recordatorio de que un descuido al volante puede convertir una carretera en un campo minado. ¡A manejar con cuidado, que no estamos en una película de acción!
