Ary Gisell Silva Raya se llevó una sentencia de 20 años de prisión por su rol en el asesinato de tres turistas extranjeros en Ensenada, Baja California. Los hermanos australianos Jake y Callum Robinson, junto al estadounidense Jack Carter Rhoad, perdieron la vida en abril de 2024 en Punta San José, en un robo que salió fatalmente mal.
La Fiscalía de Baja California demostró que Silva Raya fue quien instigó el asalto al notar los objetos de valor de los surfistas, como su camioneta Chevrolet Colorado y teléfonos caros. “Traen buen teléfono y buenas llantas”, habría dicho a sus cómplices, según registros judiciales. Lo que empezó como un robo con violencia escaló a homicidio cuando las víctimas resistieron. Los agresores les dispararon en la cabeza y escondieron los cuerpos en un pozo de 15 metros, intentando borrar huellas al quemar el campamento. Los cadáveres fueron hallados el 3 de mayo en La Bocana.
Silva Raya admitió su culpa en un juicio abreviado, reduciendo su pena de más de 30 años a 20, además de pagar una reparación de más de 54 mil pesos. Otros implicados, como Jesús Gerardo García Cota “El Kekas”, siguen en prisión en El Hongo, enfrentando cargos por homicidio. La fiscalía aclaró que el móvil fue el robo, no la nacionalidad de las víctimas.
Jake, médico, Callum, estrella de lacrosse, y Jack, con boda planeada, dejaron un vacío inmenso. Sus familias, con apoyo de autoridades como el primer ministro australiano Anthony Albanese, lloran una pérdida que oscurece al mundo. Ensenada, otra vez, bajo el foco por violencia contra turistas. ¿Playas de ensueño o de pesadilla? La justicia sigue surfeando en aguas turbias.