
Rafael Grossi, de nacionalidad argentina, declaró que tiene la intención de presentar su candidatura para el puesto de secretario general de la ONU, en un momento en que se avecina el proceso de selección para suceder al actual titular. Esta afirmación se produjo el martes 26 de agosto de 2025 durante una conferencia de prensa en Viena, donde Grossi expresó su interés en contribuir a los desafíos globales desde esa posición de liderazgo. De acuerdo con sus palabras, Grossi considera que su experiencia en asuntos internacionales lo posiciona adecuadamente para abordar temas como la no proliferación nuclear, el cambio climático y la resolución de conflictos, enfatizando la necesidad de una ONU más efectiva y unificada.
«Creo que es el momento oportuno para ofrecer mi visión y dedicación a la organización», manifestó Grossi, añadiendo que formalizará su postulación en las próximas semanas ante los mecanismos correspondientes de la ONU. No especificó detalles sobre apoyos diplomáticos iniciales, pero mencionó que ha mantenido conversaciones preliminares con representantes de varios países miembros. La declaración ha generado reacciones variadas en círculos diplomáticos, con algunos elogiando su trayectoria y otros cuestionando el timing, dado que el mandato actual del secretario general concluye en 2026.
Fuentes de la ONU recordaron que el proceso de elección involucra recomendaciones del Consejo de Seguridad y votación en la Asamblea General, donde candidatos de diferentes regiones compiten por el rol. Grossi, quien ha trabajado en entornos multilaterales, destacó su compromiso con el multilateralismo y la equidad en la toma de decisiones globales. En Argentina, el anuncio fue recibido con entusiasmo por figuras políticas y medios locales, que lo ven como una oportunidad para elevar la presencia del país en la arena internacional.
Grossi reiteró que su candidatura se basa en principios de transparencia y cooperación, y que buscará respaldos amplios para avanzar en el proceso. Analistas indican que esta movida podría influir en dinámicas regionales, especialmente en América Latina, donde no ha habido un secretario general desde hace décadas. La ONU no ha emitido comentarios oficiales sobre la declaración, pero se espera que el tema se discuta en sesiones venideras.
Grossi concluyó su intervención invitando a un diálogo abierto sobre el futuro de la organización, y se comprometió a detallar su plataforma en documentos posteriores. Este desarrollo se enmarca en un período de transiciones en liderazgo global, con múltiples aspirantes potenciales emergiendo para el cargo. La situación se mantiene en evolución, con posibles actualizaciones a medida que Grossi proceda con su postulación formal.
