El exmandatario boliviano Evo Morales dio inicio este jueves al procedimiento de inscripción de su flamante organización política, denominada Instrumento Político por la Soberanía de los Pueblos (IPSP), con la meta de tomar parte en las votaciones departamentales y municipales programadas para abril de 2025. Morales, quien lidera una facción del Movimiento al Socialismo (MAS), presentó la solicitud ante el Tribunal Supremo Electoral (TSE) en La Paz, acompañado por centenares de seguidores que se congregaron en las afueras del ente electoral. “Estamos aquí para recuperar el IPSP, que es el verdadero instrumento del pueblo”, manifestó Morales durante el acto, al tiempo que criticó al gobierno actual de Luis Arce, a quien acusó de haber “usurpado” el MAS.
El nuevo partido busca obtener la personería jurídica para poder presentar candidaturas en los nueve departamentos y más de 300 municipios de Bolivia. Según Morales, esta iniciativa surge tras la división interna en el MAS, donde él representa el ala “evista” opuesta al sector “arcista” que respalda a Arce. El TSE tiene un plazo de 120 días para revisar la documentación y decidir sobre la aprobación del IPSP.
Morales expresó confianza en que el proceso se desarrolle sin obstáculos, aunque advirtió que recurrirá a instancias internacionales si se presenta alguna irregularidad. Esta movida política se produce en medio de tensiones crecientes en Bolivia, con Morales enfrentando varios procesos judiciales, incluyendo acusaciones de estupro y tráfico de influencias, que él califica como persecución política. De lograr la inscripción, el IPSP competiría directamente con el MAS oficial, lo que podría fragmentar el voto de la izquierda en las elecciones regionales.
Morales, que gobernó Bolivia entre 2006 y 2019, busca así mantener su influencia en la arena política nacional. El anuncio generó reacciones mixtas: mientras sus simpatizantes lo celebran como un paso hacia la “recuperación del proceso de cambio”, opositores lo ven como un intento de dividir al oficialismo para beneficio personal. Las elecciones subnacionales de 2025 serán clave para definir el control de gobiernos departamentales y alcaldías, en un contexto de polarización política en el país andino.