¡Escándalo en la capital! La bancada de Morena en el Congreso de la Ciudad de México señaló al PRI, liderado por Alejandro Moreno Cárdenas, de orquestar grupos de choque para desatar violencia durante la marcha del 15 de noviembre. Según Morena, el PRI jugó sucio y con billete en mano.
El diputado Paulo Emilio García, vocero de Morena, reveló que ofrecieron 10 mil pesos por cabeza a quienes se sumaran al desmadre. Intentaron reclutar a 400 personas, aunque no lograron el número. Los convocados, de entre 30 y 50 años, no eran chavitos inocentes, sino mercenarios contratados para el caos. Xóchitl Bravo Espinosa agradeció a militantes del PRI que destaparon la cloaca, asegurando que ese partido no solo armó la logística de la supuesta “marcha de la Generación Z”, sino que ejecutó los golpes.
Morena presentó pruebas que implican a los diputados federales Carlos Eduardo Gutiérrez Mancilla e Israel Betanzos, quienes habrían coordinado financiamiento y logística junto a líderes de alcaldías como Cuauhtémoc. Incluso señalan que Gutiérrez Mancilla contactó a un tal Ángel Gutiérrez Javier, alias “El Faria”, para los actos violentos. Bravo Espinosa anunció que llevarán al pleno una iniciativa para investigar a fondo a estos legisladores y formarán una Comisión Especial de Investigación para destapar nexos con grupos porriles.
Según Morena, todo esto no es por preocupación ciudadana, sino por intereses económicos y políticos. ¿El PRI y Acción Nacional detrás del caos? Esto parece más un guion de intriga que una marcha pacífica. Mientras las acusaciones vuelan, la capital espera respuestas. ¿Será verdad o solo un round más de la grilla política?