
¡Trump saca el garrote! El martes, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, soltó una bomba verbal en una reunión de gabinete en la Casa Blanca, advirtiendo que cualquier país que trafique drogas ilegales a su nación podría ser atacado. Sí, leyó bien: atacado, como en una película de acción de los 80.
“Cualquiera que esté haciendo eso y vendiéndolo en nuestro país está sujeto a ser atacado”, afirmó Trump ante periodistas, con la misma seriedad con la que uno pide una pizza extragrande. La declaración llegó tras mencionar específicamente la cocaína proveniente de Colombia, poniendo a ese país en el centro del radar como si fuera el villano de un guion de Hollywood. No dio detalles sobre qué significa “atacado” —si es militar, económico o un simple tuit furioso—, pero el tono fue más claro que un día sin nubes.
Esto no es un juego de mesa geopolítico. Trump parece dispuesto a convertir la lucha contra las drogas en una cruzada personal, señalando a naciones enteras como si fueran el enemigo en un videojuego. ¿Es una estrategia para presionar a países productores o solo un comentario al calor del momento? Mientras tanto, Colombia y otros deben estar sudando más que un turista perdido en el desierto.
La Casa Blanca no ha aclarado si esto es política oficial o solo Trump siendo Trump. Pero una cosa es segura: el mundo de las relaciones internacionales acaba de subir de temperatura. ¿Será este el inicio de una guerra antidrogas estilo blockbuster o solo un tráiler sin película? El tiempo dirá.
